Si sientes que el día a día te absorbe, que no llegas a todo y que te falta tiempo para cuidarte a ti misma… entonces acabas de encontrar la actividad perfecta para ti.
Conecta con tu cuerpo, tu ser y relaja tu mente de la rutina.
Porque, a veces, el cuerpo mismo pide detenerse, reclama cuidado… y lo mejor que puedes hacer, es escucharlo.